Desnutrición en adultos mayores

   Seres llenos de vida, con huellas y experiencias únicas; así son los abuelos y abuelas de millones de personas en el mundo. 

Hoy, la población adulta mayor enfrenta un problema de gran magnitud que requiere de soluciones contundentes: la deficiencia nutricional.

Desnutrición como causa de muerte en ancianos.
Imagen tomada de Eroski Consumer.

  Por lo tanto, ¿cuáles con las estadísticas referentes a adultos mayores que mueren por desnutrición? ¿Qué pasa en Costa Rica? ¿Qué se puede hacer al respecto?

  La alerta se dio luego de que al indagar en los archivos del Instituto Nacional de Estadística y Censos, INEC, se encontró que la población adulta mayor representó el 75% de las defunciones por causa de deficiencia nutricional durante el primer semestre de 2010, un 17% más que lo registrado durante los dos semestres del año 2009.

  Es decir, a junio del año pasado se contabilizó que el 75% de las defunciones por una insuficiente nutrición correspondía  a la población mayor a 65 años de edad; mientras que según el informe anual de hace dos años para el mismo grupo etario la cifra era del 58%.

¿Por qué ha aumentado la desnutrición?

  Según la nutricionista, Laura Acuña, "el adulto mayor tiene un manejo nutricional complejo, puesto que, conforme pasan los años, generalmente, el apetito se reduce y se produce una anorexia por la edad".

  Esto se debe a factores tales como: disminución del gasto energético y de la actividad física, cambios fisiológicos y patológicos que son propios del proceso de envejecimiento. 

La depresión induce a perder el apetito.
Imagen tomada de IDem.

  Asimismo, Acuña señaló que aparte de las razones meramente nutricionales, los factores psicológicos intervienen en gran medida. 

Esto dado que tanto la soledad como la depresión suelen generar rechazo hacia los alimentos, y cada vez son más los adultos que viven solos o lejos de sus familias.

¿Cuáles son las soluciones?

  Los nutricionistas recomiendan que los adultos mayores realicen seis comidas al día dado que suelen sentirse satisfechos con pequeñas cantidades. 

  Además, se debe procurar la ingesta de proteínas (carne de res, pollo, pescado, huevos), frutas, vegetales y lácteos para reforzar la salud ósea.

  Una propuesta educativa que responda a las necesidades alimenticias de la población adulta mayor debe ser un objetivo de los nutricionistas por reforzar, para de esta forma disminuir tanto las defunciones por deficiencia nutricional como por enfermedades del corazón, cáncer, entre otros. 

  Sin importar el credo religioso de cada persona, en la conmemoración de la Jornada Mundial de los Enfermos este once de febrero, usted puede hacer la diferencia impulsando mejoras en la nutrición de la población adulta mayor, ¿se anima?

Listón de banderas: Jornada Mundial de los Enfermos.